Del 15 de diciembre de 2010 al 30 de enero de 2011

Marisa Moreno Ruiz-Zorrilla
i r r e a l e s i r e a l e s

“En la exposición irreales i reales, realizo las obras con luz, pigmentos y en ocasiones pintura digital, proponiendo una dinámica nueva en el lenguaje del arte actual.

Busco discursos ajenos a lo establecido e introduzco una reflexión en la creación plástica. No reproduzco lo que veo, sino que intento profundizar en una interpretación del mundo, de la vida, del ser… Las obras oscilan desde la concreción formal a la abstracción de la realidad, desde las fantasías realistas a la realidad abstracta.

Planteo en esta exposición el tema de la frágil frontera entre identidades, culturas, pintura y fotografía, realidad e irrealidad…, con la consiguiente dificultad del hombre posmoderno para distinguir, posicionarse o elegir en que lugar quiere estar, pudiendo encontrarse en todos ellos al mismo tiempo si así lo desea…”



LolaOrato e s p a c i o d e a r t e

Calle Oscura, 9 - 33009 Oviedo
doloresorato@hotmail.com – Tel: +34 985 21 56 70

Martes de 18 a 21 h. * Miércoles a Sábado de 11 a 14 y de 18 a 21 h. * Domingo de 11 a 14 h



Artenativa Ana Vega Juan Falcón by Radio ArteNativa01



RADIO ARTENATIVA

Después de un periodo en el que hemos estado en multitud de actividades, ya sabéis...buscando a aquellas personas que se mueven y no paran, y además no sólo eso, sino que además son muy queridas.
A continuación os dejamos con el último programa (del año) en el que hemos invitado a la escritora Ana Vega y al pintor Juan Falcón.


Relación de la literatura con la música
Chelsea Hotel por Rufus Wainwright



Breve testimonio de una mirada
Ana Vega
Presentación 18 de diciembre librería ''la buena letra'' Gijón a las 19 horas.






Exposición de pintura ''Miradas''
Juan Falcón
Inuguración: 17 de diciembre en el café ''la Cooperativa'' Oviedo a las 20h.
del 17 de diciembre al 17 de enero



Ritmo, flamenco y color
Camarón - Paco Lucía



La mujer anochecía
Ada Menéndez
Presentación 18 de diciembre librería ''la buena letra'' Gijón a las 19 horas.


y un fuerte abrazo...




La música que emociona a Ana Vega
Tom Waits - Early Year



Sentimientos en la creación

Proyecto ''Instinto'' Ana Vega y Juan Falcón
Sueño masculino












JUAN FALCÓN GARCÍA
Movil 676858867

BRINDIS

Foto realizada por JESUS DIAZ BLANCO

REALIDAD PARALELA,

por ANA VEGA

Ana Vega nos ofrece en Realidad paralela multitud de historias dibujadas con breves pinceladas. Al igual que los pintores impresionistas, su escritura busca conmover al lector con cortas frazadas llenas de humanidad y poder. Su alma poética guía su mano a lo conciso, a lo sustancioso, sin abandonar - como los buenos escritores de relatos - el gusto por el silencio explícito que hace pensar al lector”.

(del prólogo de Esteban Gutiérrez Gómez, “Bacovicius”)






Realidad Paralela Por Ana Vega



http://www.sinjania.es/






TALLERES




Con el cambio de página web y de plataforma online, hemos querido darle un nuevo impulso a los talleres y cursos que convocamos.En esta nueva versión de Sinjania los cursos se unifican y pasan a tener una duración semestral, aunque en próximas convocatorias ofertaremos talleres más cortos para iniciarse en la escritura. Además, para la próxima convocatoria de febrero tendremos algún curso nuevo que proponer, como el de crítica literaria.Recordad que tenemos un variado catálogo de cursos online: todos ellos son accesibles y la plataforma online en la que se imparten es de uso muy sencillo. También introduciremos progresivamente algunos cambios en estos talleres online, como los chats con los profesores, para que las dudas puedan resolverse de forma más rápida y directa.Estamos abiertos a sugerencias, así que ya sabéis que podéis participar en este blog para ofrecernos propuestas y opiniones. Nuestros cursos también son los vuestros.



LA DAMA DEL FRÍO.

DIEGO MEDRANO






Ella escribe en bares, tal y cómo José Hierro lo hacía, incapaz de crear en casa, por eso de que vuelo y nido, quién lo duda, son términos contrapuestos. Tras 'El cuaderno griego', Ana Vega (Oviedo, 1977) vuelve al ruedo literario con 'Breve testimonio de una mirada' (Amargord Ediciones), que presenta este 18 de diciembre en la librería gijonesa La buena letra. Ana Vega vuelve a ser la dama del frío, la mujer que experimenta con supervivencias varias, aquella que cuelga de su blog toda una poética de Damage L. Malle: «Las personas heridas son peligrosas, saben que pueden sobrevivir». Hablamos con ella en una de sus «oficinas», la coctelería Martana (Arquitecto Reguera, 3) de la tierna Vetusta. «Amor y deseo son las dos lindes, los límites precisos, de este nuevo libro. ¿Cómo se relacionan?». «Hay cierta contradicción entre deseo, entrega, instinto, como realidades evidentes o palpables, siempre cercanas, y aquello más genérico que el ser humano llama amor. Hay toda un teoría del amor como máscara, mentira, manera de esconderse en otros, hipocresía de los cobardes por miedo a la soledad». «Expone un tratamiento muy original del proceso vivencial de la pasión. Una extraña suerte de diario». «Sería tratar una historia amorosa desde distintas perspectivas. No siempre la más dulce, sino también la más severa: no hacia dentro, sino hacia fuera. Marguerite Duras lo describe a la perfección: 'Me gustas, qué acontecimiento'. El proceso de una relación visto como crecimiento propio, empleando al otro como mero espejo, modo de corrección, avance hacia nosotros mismos.La nitidez con la que nos vemos reflejados en el amante, en el mismo momento de la cópula, y de cómo eso se va perdiendo, se va yendo». «Un libro muy sexual y sensual le ha salido». «El sexo es la única realidad tangible o posibilidad de amor. Aunque desecho el término 'amor': sería más apropiado hablar de vínculo, unión con duración marcada desde el principio. Un acuerdo mutuo de no engaño. De ciertas pautas a seguir. De una improvisación constante en la que ambos están de acuerdo». «¿Somos, aquello que preconizaba Gilles Deleuze, puras maquinas-deseantes?». «El deseo siempre se mantiene neutral, puro con el paso del tiempo, no tan envilecido. Ese deseo innato, predecesor del primer beso, y poco atañe, generalmente, a cuanto ocurre después. Es lo mismo que el poema: el fogonazo previo a su construcción, luz efímera. Algo muy femenino: la búsqueda, a través de cuerpos y nombres, de nosotros mismos, de la propia identidad. Una búsqueda que marca tanto vida como escritura, en cada paso dado». «Hábleme de la mirada. A mí, las miradas largas siempre me han fascinado». «Una mirada puede resumir todo en un sólo gesto. Ahí es imposible ocultar la verdad. Sirve de testimonio a una historia en la que todos podemos reconocernos.Es la que describe el absurdo, el sinsentido del encuentro con el otro, todo lo que eso conlleva. El choque brutal contra una conciencia lúcida que pretende hallar esquemas en un lugar inhóspito o imposible: el amor. Es la incomprensión del autista hacia aquello que no puede descifrar. Cuyos códigos más íntimos siempre desconoce». «Hay también en su libro mucho de camino, de proceso, de rito, por el que amor y deseo se fraguan». «La senda, con golpes o sin ellos, que todos hemos de recorrer. El camino que implica, nos guste o no, soledad, una mano o un cuerpo cercano, noches varias, y asumir eso que forma y formará parte de toda nuestra vida, estemos de acuerdo o no. La impotencia de sentirse incapaz de controlar aquello que apenas podemos nombrar, tan sólo sentir, tocar, buscar con la boca, poco más». «Mundo demasiado intangible. ¿No cree?». «Es un libro imposible, por eso habla de un mundo intangible. Esa clase de libro que pretende descifrar lo indescifrable. Ninguna certidumbre, ser sólo un mero acercamiento. Ese momento en el que dos cuerpos logran comprenderse del todo sin nombrar palabra alguna. El milagro. Cómo describir eso». «No tengo muy claro lo de que siempre sea el Otro, con mayúsculas, quien nos perfile». «El amor es un modo de nombrar las cosas, a nosotros mismos, el reflejo en los ojos del otro nos ofrece una visión definitiva y desconocida de quien creemos ser.La amputación de ese reflejo provoca un descenso al abismo tan desgarrador que tan sólo entonces alcanzamos a comprender que nuestro verdadero rostro siempre permanecerá escondido bajo alguna máscara, sellado. Es difícil mantener la fe, esa inocencia extirpada a dentelladas. Algunos no se recuperan nunca del escepticismo adherido a la piel tras la ausencia». «¿Y qué es la ausencia? ¿Podría usted explicarme una de mis obsesiones: ¿Por qué el amor es antes ausencia que presencia del ser amado u objeto puro de deseo?». «Bajo la excusa de la ausencia nos enfrentamos a la soledad misma del ser. Esta se duplica siempre, frente al abandono. Es la consciencia brutal del que sigue atrapado todavía en un pasado del que le cuesta salir y al que debe renunciar en legítima defensa, bajo el escudo de ese amor ausente. Hay una cita en el texto de Scott Fitzgerald muy buena: 'Y así vamos adelante, botes que reman contra la corriente, incesantemente arrastrados hacia el pasado'. Asimismo, el pasado doliente y doloroso vuelve al presente. Es el deseo de continuidad, de aferrarse a lo que queda, al recuerdo. O aparece, sin más, como reclamando ser visto, para no ser injustamente olvidado, para poder, sí, retener esa mirada. Un camino hacia el olvido, con paso firme, lento, decidido, desde el pasado al futuro». «¿Y el presente, oiga?». «Juan Ramón Jiménez lo cantó en un poema: 'Le taparía el tiempo con rosas, porque no recordara'. El presente se transforma en un mero trámite doloroso entre ambos estados, puesto que, si el pasado sirve como faro que dirige las acciones actuales, el futuro pasa a ser el objetivo fundamental de la catarsis, la esperanza que ha de llegar, que se intuye, aunque aún no se pueda sentir.La incredulidad de quien se ha sentido amado cuando golpea con la realidad». Ana Vega habla en ecuaciones, su perfume es el de los muy literarios, la palabra como escáner, el vivir literariamente como el mejor abrigo, el refugio más duradero. Yo creo, no sé, que siempre está haciendo literatura. Una manera de comerse o beberse la vida desde el verbo y no al revés. Dice en algún momento del poemario: «Si me rescatas del frío, prometo abandonar el invierno para siempre». Esperemos que donde dijo invierno, no haya querido decir deseo.









Merci, Javi...




EDITORIAL ORIGAMI







Sinjania Talleres de Escritura quiere ser un punto de encuentro para todos los interesados en la creación literaria, ofreciendo distintos cursos de iniciación a la escritura creativa centrados en los principales géneros: poesía, relato o novela, sin olvidar otras materias como el guión de cine, la traducción, crítica literaria, etc.



Nuestros cursos están basados en la lectura y comentario en grupo de los textos que los alumnos crean, el análisis de los mismos y la puesta en común de los diferentes conocimientos, todo ello con la guía de un profesor que asesorará a los participantes en su quehacer narrativo. Así, los cursos están planteados en forma de taller, por lo que son los alumnos los que toman el protagonismo en las clases: comentando, opinando y, por supuesto, escribiendo. De manera que los talleres son un foco de reunión donde personas unidas por su interés por la escritura y la literatura pueden intercambiar opiniones, dando salida a su creatividad, compartiendo lecturas y conocimientos, aprendiendo a apreciar su propia obra en construcción y la del resto de alumnos, desarrollando, en definitiva, un sentido literario crítico.

Además, Sinjania Talleres de Escritura pone su experiencia en la gestión de cursos y talleres a disposición de todas aquellas entidades y organismos de ámbito cultural que deseen ofertar talleres de creación literaria o cursos de escritura eficaz.
Ya hemos colaborado con:
ñ Instituto Asturiano de Administración Pública “Adolfo Posada”
ñ Fundación Municipal de Cultura de Siero
ñ Ayuntamiento de Navia
ñ Biblioteca Municipal de Nava

Los talleres que se imparten son:
Taller de traducción
Taller de guión
Taller de narrativa
Taller de poesía
Taller de relato (iniciación y avanzado)
Taller de escritura eficaz
Taller de crítica literaria
Tutoría de proyectos literarios



Para más información, puede consultarse nuestra página web, http://www.sinjania.es/, o nuestra página de Facebook, http://www.facebook.com/sinjaniatalleres






EL PINTOR DE LA FELICIDAD


Juan Falcón


por Diego Medrano







«Viaja usted todo lo que puede». «Me fascinan las megalópolis. Suelo ir solo o con mi hermana Lucía, que me ayuda un montón, junto a mis padres, que me han apoyado siempre. Cojo cachitos de ciudades para formar una mía. Roma es igual que Oviedo o España, por ejemplo. No me gusta estar con demasiadas personas, gente que de algún modo me limite. La confianza y el respeto son el motor de mi vida». «¿Y el instinto?». «Claro, ahí es donde entra el mundo animal. Yo, si fuese uno, sería un búho. El animal siempre reacciona de la misma forma Trabajo siempre de noche: de doce de la noche a ocho de la mañana son mis horas de máximo rendimiento. Luego, un café, con el crepúsculo: el día que comienza y el cuadro que ya se está acabando, un mundo de contrastes indescriptible». «Algo incomprensible: usted no tiene galerista». «No, por ahora expongo en bares. Y es mi hermana quien me mueve la obra. Tengo ganas de tener una galería que me apoye». «Es usted un enamorado del pasado». «El siglo pasado fue mucho más innovador. Hay figuras, Picasso por ejemplo, ejemplo de pasiones que no fenecen. Hasta los ochenta y tantos sin descanso. Adoro el surrealismo, el cubismo, sus colores. Me atrae la simbología, me encantan los paraguas, cuanto da cobijo y protege. Me gusta el heroísmo de quien se adapta a las circunstancias, por muy duras que sean, para vencer». «¿Está orgulloso de su obra?». «Por supuesto. Más no puedo entregar: es la certeza de haberlo dado todo. Muchas horas, el esfuerzo máximo. Luego, algún sábado, ir a conciertos, unas cervezas, la música en directo, todo eso me relaja. Defiendo a capa y espada mi profesión. Y creo en el progreso del artista individual. Sin sorpresa, no hay progreso». «Sólo lee ensayos, tengo entendido». «Sí, mucha psicología. Me gusta mucho leer trabajos académicos. Busco respuestas: por qué somos como somos. Me gusta la ciencia, controlar mi forma de pensar». «Le encanta lo mestizo». «Sí, mucho. Las culturas entretejidas. Lo mejor de cada pueblo. La obra tiene que englobar también todo eso: tiene que haber alegría junto a la tristeza, frío junto a calor, etcétera. Yo sé que un cuadro determinado no lo voy a volver a hacer, no lo voy a repetir. No me gustaría que mis cuadros estuviesen en lugares donde no los fueran a valorar». «¿Cuál es su mayor suerte?». «Mi familia». A sus 25 años Juan Falcón sorprende por su nobleza, por su aura, la clase de buena persona que sonríe con la mirada. Alguien que, como todos los grandes, sólo experimenta con el esfuerzo y, en el páramo de su soledad, se alumbra y calienta a partir de pequeños trazos.



http://http//www.elcomerciodigital.com/v/20101127/cultura/pintor-felicidad-20101127.html




Woman



(Woolfmother)
para todas las mujeres del mundo





Esa mujer que todos conocemos,
quien manifiesta su supervivencia
cada día a golpe contundente
de tacón afilado cual navaja,
que camina por las calles con absoluta decisión
pues sabe desde siempre que su camino se recorre a solas.
Aquella que no teme a la verdad,
la que agarra a su hijo de las entrañas mismas
para arrancarlo del dolor,
la que antepone lo imprescindible,
lo realmente importante,
ante lo que nunca será bien visto por los hombres
que creen dirigir la tribu fantasma.
Mujer que corre con los lobos,
guerrera, la no vencida,
la que no abandona el ring
hasta pisar la lona.
La eterna Juana de Arco.
Aquella que lame sus heridas
a solas como los gatos,
la que se defiende una y mil veces
ante la impunidad de la injusticia que nos vence cada día.
Ella, tú, nosotras, las que seguimos creyendo que en cada grieta,
con cada golpe,
la fuerza crece en nuestro vientre
y porque la mujer sabe transformar el mundo en acto,
en hecho,
en maneras de sobrevivir a la desesperación profunda.
Aquella que deshace el nudo con los dientes.
Porque ellas engendrarán “legiones de hombres buenos”
que crecerán en multitud por los siglos de los siglos
reproduciéndose en constante mutación continua
hasta alcanzar la absoluta cercanía
que aún necesitamos sentir entre mujer y hombre.
Mujer que sueña en blanco y negro,
que conoce los abismos pues en todos ha estado,
que pelea y no se cansa pues su lucha incesante
tiene el poder de las mareas
cuyos océanos reproducen de forma rítmica
cada uno de sus gestos,
ese vaivén que nos describe en sigiloso susurro su anatomía.
Mujer más allá del cuerpo,
mujer sin amo “ni patria ni religión”,
mujer cuyo origen nace en el centro mismo del universo
y a él regresa en cada muerte.
Mujer que renace por tanto cada día
en cada minúscula población del mundo
y cuyo llanto es el llanto del mundo entero.
Mujer violada, torturada, sacrificada, rota, en definitiva,
por el verdugo que tanto teme su poder ancestral.
Mujer que ha soportar la sangre sobre su piel
cuando decide, finalmente, pero nunca tarde,
alejarse de quien se agarra con fuerza a su espalda
para tapar de modo alguno la debilidad
que tan sólo los ojos realmente abiertos,
aquellos que habitan el alma,
pueden ver en el rostro de la ira, en la debilidad ajena.
Cansancio, peso, dolor en el centro mismo del corazón
que viene de lejos, tan antiguo, que nos cuesta reconocer
como nuestro.
Mujer que decide seguir peleando frente a las voces
que susurran rendición,
frente al rol de hembra pacífica
que ha de conservar las formas que otros le arrebataron.
Todas y cada una de las mujeres
que deciden, una y otra vez, llevar a cabo sus propias vidas,
sus propias reglas, decisiones, normas,
pese a todo lo que eso implica,
las que saben maquillar el golpe en el ojo o la mejilla
en el que aún late el corazón viejo
y aquellas que de las lágrimas últimas extraen
una sonrisa final
que desconcierta y desconcertará siempre al alma perdida
de quien busca de forma errónea más allá de sí mismo,
aquel que padece hambre eterna,
la escasa inteligencia de los que jamás se atreverán
a infringir norma alguna
repitiendo así el papel eterno del verdugo,
pagando su temor en el cuerpo del otro
con todo tipo de herramientas verbales y físicas,
instrumentos perfeccionados a lo largo de los años,
cuyas marcas la mujer arrancará a dentelladas,
una y otra, una y otra, una y otra vez,
todas las veces necesarias.
La impunidad es esa sensación que aún y tal vez siempre sentiremos cerca,
al lado justo,
en nuestras manos,
porque sabemos que nosotras, mujeres,
elegimos pelear, que nadie consigue ni conseguirá jamás domesticarnos,
pues como animales salvajes que somos
el instinto nos salva y salvará de toda trampa.
Los reptiles del mundo que conocemos
seguirán empecinados en colarse en nuestras vidas,
seguirán intentando silenciar nuestras voces,
que el susurro de la culpa que nos inculcaron
germine en lo más profundo
hasta quedar atrapadas en las redes más propicias
para ellos, para la caza,
para aquellos que crearon la normativa vigente,
quienes seguirán castigando nuestra decisión de manifestar nuestro poder y sabiduría,
defender aquello en lo que creemos,
disfrutar del cuerpo que nos ha sido concedido a nuestro antojo
y no al antojo de quien duerme a nuestro lado
ciertas noches o tan sólo una,
nuestra voz se escuchará alta y clara
porque hace ya demasiado tiempo decidimos
no callarnos, nombrar, acusar, señalar incluso
al culpable de las atrocidades cotidianas
que ocurren a nuestro alrededor.
El segundo sexo nunca fue el sexo débil,
quien hiere o golpea es aquél que teme
y no al contrario.
No nos engañemos,
nos cortan el paso, nos detienen,
nos mutilan, nos asesinan, porque nos temen,
y si eso es así, y así lo es, puedo asegurarlo,
nadie nunca jamás,
podrá romper el círculo
de lucha constante en el ring
por alcanzar aquello que nos pertenece
y nos ha pertenecido siempre,
no sólo una “habitación propia”
sino también la casa entera, nuestro lugar en el mundo,
aquel que hemos ganado,
aquel que siempre nos ha pertenecido.
No nos creamos desheredadas de lo que siempre fue nuestro.
La manzana original
nunca fue castigo alguno
sino el primer paso
diminuto, escaso,
hacia la libertad
que ahora hemos de tomar por completo.
Ha llegado la hora de reconocernos frente al espejo
y que ese gesto
nos devuelva la imagen real,
el triunfo alcanzado
por todas aquellas que nos preceden
a quienes debemos rendir homenaje de la única forma posible:
peleando,
peleando siempre,
hasta el final….






















Para escribir y participar....


"Bastaría con observar a ciertos individuos humanos para darnos cuenta de que venimos del mono, no obstante, trataré de sentar las bases científicas que lo demuestren"
Charles Darwin

Cuando
se miraba
en el espejo,
siempre
le devolvía
la mirada
el mismo
tonto.
........................
Crearse
enemigos
es un lujo
que no está
al alcance
de cualquiera.
..............................
El silencio
nos recuerda
de dónde venimos
y a dónde vamos.
Por eso hay tantos
que no lo soportan.
........................................
Los caballeros
las prefieren
turbias.
......................................................
Qué poco
dura
la felicidad
en la casa
del listillo.
....................................................................
Los pequeños
pueblos,
las comunidades
cerradas
son grandes
infiernos.
.............................................................................................
En soledad
somos
personas;
en manada,
borregos.
...........................................................................................
Si convives
con alguien
destructivo,
destruirá
lo mejor
de ti.
.........................................................................................................
Piensa por ti mismo;
que tu conciencia
no sea la de otro.






Un mundo en miniatura
Huerga & Fierro
Angel Guache
Generación blogger: desmelenadas
Por Rebeca
No voy a empezar diciendo que todas las autoras aquí reunidas son lo mejor que he leído nunca. Estaría mintiendo si lo hiciera, pero ojo, no porque no lo sean, sino porque son demasiado distintas para ser todas santas de un mismo devoto. En la variedad está el gusto y para gustos, los poetas.
El caso es que a medida que una va leyendo La manera de recogerse el pelo (Bartleby Editores) se pregunta por qué demonios David González ha llamado así a su selección y no “Las distintas maneras de soltarse la melena”. Y una se lo sigue preguntando hasta que llega a la autora del poema que da título al libro, Cristina Morano. Impactante. Y hay unas cuantas autoras de mi devoción antes de llegar a ella. Ahí está la potente contención de Ana Vega, que habla con asepsia de la desesperanza “Si me rescatas / del frío, / prometo abandonar / el invierno / para siempre…” O las reflexiones de Ana Pérez Cañamares sobre la metamorfosis que supone pasar de ser hija a madre.
Al resto de escritoras no las conocía y, en su mayoría, apuntadas quedan en mi lista de lecturas pendientes. Las antologías cumplen una función, tan importante como evidente, y es la de dar a conocer a los autores que las componen. Así de simple. No es necesario plasmar un punto de inflexión crucial entre las placas tectónicas de la historia —aunque a veces ocurra—. Pero como bien dice José Ángel Barrueco en el prólogo “toda antología contenta a unas 50 personas, pero cabrea a 500”. La manera de recogerse el pelo no deja de ser una instantánea de lo que se está haciendo en un determinado momento, es decir, ahora mismo, antes de que el embudo del tiempo haya llevado a cabo su criba natural.
Pero sigamos con las autoras. Destacan Ester García Camps y su facilidad para darle vueltas al lenguaje como si fuera plastilina —“sonrisas disfrazadas de nosotros”— y Gloria Gil Romera con su solemnidad de tragedia griega —“Olvidad los poemas reciclados / y no hagáis con los poemas un incesto. / Y para ser felices / sed felices”— o los poemas narrativos de Déborah Vukusic, con iguales dosis de denuncia e ingenio, léase, por ejemplo, Lolita Monroe: “me levantaré el uniforme /happy birthday / liguero negro / mister teacher / ligas rojas”.
Asimismo, también nos encontramos con Nuria Mezquita y sus reflexiones sobre el masoquismo —“para atarme fuerte las venas a los tacones / para gritaros que no me da la gana de cortar el alambre, / me gusta /sentirlo / tenso”— o con Isabel Bono, que comienza con una especie de diario onírico y concluye con una recopilación de poemas en formato mail “de cerca me pareces / más roto / menos alto / más hambriento”. Todo para concluir con el dvd incluido en el libro y realizado por Patty de Frutos, que en cierto modo aglutina el surtido de voces con su estética de videoclip.
Por su puesto, descubrimos defectillos aquí y allá, algún que otro exceso de “yo” y alguna explicación de más que se carga algún poema, pero haciendo balance, al menos para mí, simple lectora de a pie, esto sí es poesía. Eso sí, poesía con minúsculas, que las mayúsculas quedan para los que citan en latín y para los que consideran que sólo los muertos conforman el estrato geológico que compone la Literatura. ¿Recuerdan esas fotografías en blanco y negro, difuminadas, en las que aparecen los nombres de los retratados —todos hombres— y hasta alguno de sus versos? Todos sabemos de quienes hablamos y cualquiera que haya ido a la escuela conoce a esos autores. Pero, ¿qué pasa con los vivos? Es verdad que, para ser estrato, todavía no se han sedimentado, pero también escriben. La Generación Blogger retratada en La manera de recogerse el pelo quedaría muy de su época en una foto tomada con un teléfono móvil y colgada en Facebook a los pocos segundos. ¿Sería una instantánea de la tan cacareada posmodernidad? La imagen sería a todo color y tal vez nunca llegara a ser papel, pero en esta ocasión las retratadas serían todas mujeres. Hay quien considera a esto discriminación, pero sólo lo será el día en que se consolide, definitiva y universalmente, el paso de musa a poeta, de personaje y proyección a persona.
VISIONICA


LABoral albergará la nueva edición de Visiónica, festival
artístico vinculado a los nuevos medios

La presentación incluye la actuación de Addictive TV y una
acción del repostero asturiano Miguel Sierra el próximo día
10 de diciembre

LABoral albergará la próxima edición de Visiónica, un festival de carácter
abierto, dirigido al público interesado en las manifestaciones creativas que
surgen de los nuevos medios. Tras varios años celebrándose en Oviedo,
este evento regresa a Gijón, de la mano de su comisario, Roberto Lorenzo,
quien, en colaboración con el Centro de Arte y Creación Industrial de
Gijón, ha organizado un amplio programa que se celebrará los últimos
viernes de cada mes durante el primer cuatrimestre de 2011. El común
denominador será la presentación de acciones y propuestas centradas en
la búsqueda de nuevos lenguajes audiovisuales para la creación de
experiencias alternativas en cine y videoarte.
La séptima edición del festival se celebrará con el nombre de LABvisiónica
y estará enmarcado en los ciclos de conciertos de LABoral. Como paso
previo, el próximo 10 de diciembre, a las 21 horas, se hará una
presentación en el espacio Chill-out del Centro.
Para la ocasión, Roberto Lorenzo ha elegido una acción del repostero
asturiano Miguel Sierra, quien, con su repostería personal, reinterpreta
lo tradicional, recupera ingredientes autóctonos que sorprenden por su
originalidad, elegancia y equilibrio, y crea líneas cuidadas, casi
arquitectónicas. Como en años anteriores, Miguel Sierra presenta una
sorpresa especial para Visiónica, relacionada con el temario del festival.
Sierra comenzó su andadura profesional en la Escuela de Hostelería de
Gijón. Completa su formación al lado de algunos de los mejores de España
y del mundo como Martín Berasategui, Aitor Elizegui, Angelo Corvitto,
Ferrán Adriá o Francisco Torreblanca. A lo largo de su carrera ha
conseguido diferentes premios, entre los que destacan “Mejor plato
creativo de Europa”, “Mejor maestro pastelero de España”, “Mejor plato
dieta mediterránea de España”, todos ellos en el año 2000; y el Premio a
la Innovación 2003 en el campeonato del mundo de Pastelería, así como
el Premio del Colegio de Críticos Gastronómicos de Asturias 2007.
Además, tendrá lugar la actuación del dúo londinense Addictive Tv,
auténticos pioneros del remix de audio y vídeo. Se trata de uno de los
únicos conjuntos de la escena electrónica que mezcla audio y vídeo
utilizando los revolucionarios reproductores DVD-J. Sus impresionantes
espectáculos deben su éxito a sus videomash-ups y a sus remezclas
audiovisuales. Han actuado en más de 40 países y en lugares tan diversos
como el Centre Pompidou de París, el Cinema IMAX de Londres y
Shanghai Museum of Contemporary Art, y los clubs Womb (Tokio),
Paradiso (Ámsterdam) y Razzmatazz (Barcelona) o Goa (Madrid), entre
otros. En el 2006, Addictive TV fue seleccionado para realizar la remezcla oficial
del vídeo promocional de la película hollywoodense Take the Lead, del
estudio americano New Line Cinema, protagonizada por Antonio
Banderas. Addictive TV realizó también los webtrailers para las películas
Iron Man, para Paramount; Slumdog Millionaire, para Pathé; y Fast &
Furious, para Universal.

Ausencia de fe



Perdí la fe.
Me quedé
atrapada
en la red
que teje
la araña
del desconcierto.


La incredulidad
certera
de quien
ha visto
demasiado.
Algo incurable.

AMIGAS

Ella dijo: soy tu mejor amiga. La otra, respondió: puedes traicionarme ahora o dejarlo para más tarde, es lo mismo.
PIROPO

El bar estaba a punto de cerrar. Había mucha gente, era muy tarde. El camarero le vio desde lejos acercarse a la barra, y colocarse justo al lado de la chica morena de ojos claros. Le había estado observando toda la noche. Una cerveza tras otra, un ir y venir constante de la barra a la esquina, donde permanecía al acecho. Toda la noche en el mismo lugar, esperando quién sabe qué. Miraba a todas las mujeres que entraban por la puerta, de arriba abajo y luego de abajo arriba. Las examinaba como un taxidermista a su presa. Parecía buscar algo. Se le cayeron dos cervezas al suelo, pero no se inmutó, fue a la barra y pidió otra. Luego otra, y luego un par de ellas más. Sin embargo, cuando la chica morena abrió la puerta y entró con su amiga, algo pareció cambiar en su rostro. Sí, ésta era. No esperó mucho. En cuanto ambas se sentaron el chico abandonó su guarida, se les acercó por detrás y se colocó a su lado. Abrió su enorme boca y gritó: “Morena”. Y cayó al suelo. Cuando llegó la ambulancia ya era demasiado tarde. Un fallo cardíaco. “Pobre chico”, dijo la chica morena. Su amiga sonrió y siguió bebiendo. El camarero se fue al baño, no se sentía bien.

PUNTO FINAL


Diez.
El eco de mi grito
choca contra la pared
del cuarto.
Nueve.
El movimiento
se convierte
en vértigo.
Cuerpos
casi
atormentados.
Convulsión.
Ocho.
El pulso se acelera,
hay cierta irrealidad
en lo que veo,
el escenario parece
humedecerse,
derretirse a mi alrededor.
Siete.
Tan sólo morder.
Seis.
Tan sólo arrancar la ropa.
Cinco.
Tan sólo boca y lengua.
Cuatro.
Quietos,
como animales
a punto de devorarse.
Tres.
Apenas un roce.
Dos.
Mis ojos en tus ojos.
Uno.
Abres la puerta y entras,
yo sobre la cama,
tu mirada feroz….
EL HOMBRE LOBO


Cecilia estaba cansada. Cuando llegó a casa arrojó el bolso al suelo y la chaqueta, se quitó el uniforme con toda la brusquedad y rabia que provocan ocho horas en una oficina. Se tumbó en la alfombra y se quedó quieta, mirando al techo. No podía pensar, ni moverse, sólo respirar hondo. Escuchó el ring con el que el teléfono parece amenazar siempre en todo momento de calma. Ni se inmutó. Siguió tumbada. El teléfono volvió a sonar. Se arrastró hasta él y acercó el auricular a la oreja como quien sujeta un ladrillo con ambas manos. María había quedado en el bar a las once con las demás. Algo rápido. Cecilia dijo que sí, que allí estaría. Volvió a tumbarse en el suelo y se arrancó las medias, como si éstas estuvieran a punto de cortarle la circulación sanguínea. Volvió a respirar hondo. Se sentó y se fumó un cigarrillo. Luego preparó algo de cena y se metió en la ducha. Cuando cerró el grifo permaneció allí de pie casi diez minutos. Su cabeza le repetía: ¿Existe algún hombre bueno? De repente, su mente elaboró una especie de rueda de reconocimiento policial, tras la mampara de la ducha del baño, de todos los impresentables que habían pasado por su vida. El mentiroso compulsivo, el infiel, el que va de víctima, el egoísta, el inseguro, el débil al que le gusta herir y el egocentrismo puro que se escondía tras todas las cremalleras que había desabrochado. Sintió que no podía respirar. Salió de la ducha, cogió la toalla y se fue a la cocina. Se tomó un whisky y se dio unos golpecitos en la cabeza con el vaso. Sentía los latidos del corazón en la sien izquierda.
A las once llegó al bar. Sus amigas le hicieron un gesto desde el fondo. Se abrió paso entre la multitud y se acercó hasta ellas. Les dijo que iría a la barra a pedir algo fuerte, que seguía perdida, con la misma pesadilla que no le dejaba dormir noche tras noche: un hombre lobo la perseguía por la ciudad, pero su voz era conocida, aunque ella no parecía recordar a quién podría pertenecer.
Cuando se acercaba a la barra, un hombre la agarró por la cintura y le dio la vuelta con fuerza. Cecilia de repente sintió miedo, le miró a los ojos pero no pudo reconocerle. Su voz le resultaba familiar. El hombre le susurró al oído: ¡Buenas noches, Cecilia! Ella, con total solemnidad, como si en su respuesta hallase la ecuación científica cuyo valor cambiaría el mundo, aquello que parecía perseguirla, le preguntó: ¿Tú eres un hombre bueno? El hombre sonrió al principio, luego comenzó a reírse con más y más ganas, hasta que la carcajada se convirtió en una especie de convulsiones que se transformaban en extrañas mutaciones en rostro y cuerpo. Su cara se alargó, le crecieron los colmillos, surgió el hocico de la nada, las orejas puntiagudas, las uñas largas y, en resumen, las fauces del lobo. Cuando la transformación concluyó, éste agarró a Cecilia del brazo y atrayéndola hacia él, mientras con las uñas de la pata derecha le rozaba el vientre -casi el pecho-dijo, con mirada torva y cierto desdén: “Sí, Cecilia, soy un hombre bueno, muy, muy bueno”. Entonces estiró la lengua hasta su mejilla. Cecilia de forma instintiva apretó las piernas. La mujer de al lado hizo lo mismo. Y la de enfrente. Y todas las mujeres del bar.
Dicen que a ciertas horas de la noche ningún hombre bueno puede esconder su verdadero rostro…